La primera del año. De madrugada escucho en el programa La Rosa de los Vientos de Onda Cero, un programa que pierde credibilidad cada vez que se emite, la indiada siguiente: "Venía con las órbitas fuera de los ojos". Nada menos. (¡Cojonian!)
Releo en Zarabanda, reciente obra de Miguel Sánchez-Ostiz, un párrafo que como diría Luis Ciges es la escojonación: "El sanatorio psiquiátrico de Humberri, el del doctor Aldea-Tapis, fue toda una institución. Duró hasta que hubo un incendio, y los locos, y los cuerdos tenidos por locos, que allí estaban escaparon por el valle". (¿De Baztan, por un casual?). ¿Se imaginan el revuelo y el jolgorio?. En este tipo de trabajos, y en este en concreto, a Miguel Sánchez-Ostiz hay que leerle entre líneas porque es autor de los que no da puntada sin hilo. Y vale por hoy, quédese para mañana.